Como cada año, la última semana de abril se celebra la Semana Mundial de la Inmunización con el objetivo de concienciar sobre la importancia de las vacunas para proteger contra enfermedades prevenibles.
Desde el Instituto Balmis de Vacunas nos sumamos a esta conmemoración que se celebra del 24 al 30 de abril. En este artículo ofrecemos cinco preguntas y respuestas sobre la vacunación, con motivo de la Semana Mundial de la Inmunización:
1. ¿Qué son las vacunas?
Las vacunas son preparados que se introducen en el organismo con el objetivo de generar inmunidad frente a enfermedades graves y prevenibles.
2. ¿Cómo funciona este tipo de inmunización?
Las vacunas entrenan nuestro sistema inmune para que desarrolle una respuesta lo suficientemente fuerte para que, al entrar en contacto con un microorganismo, nos permita protegernos y no padecer la enfermedad.
3. ¿Son seguras las vacunas?
Las vacunas son seguras y eficaces. Antes de su comercialización se realizan ensayos clínicos exhaustivos y están sometidas a controles permanentes para garantizar su seguridad.
4. ¿Quiénes deben vacunarse?
Las vacunas comienzan a administrarse a las seis semanas de vida, pero no son cosa sólo de niños. Hay vacunas que se administran a los adultos, como la del tétanos o la gripe. Además, hay algunas recomendadas durante el embarazo, como las que protegen frente a la difteria o la tosferina. Los viajeros que van a países con alto riesgo de determinadas enfermedades también deben vacunarse contra ellas. Es importante estar al día del calendario vacunal, independientemente de la edad que se tenga.
5. ¿Qué tipos de vacunas existen?
La mayoría de las vacunas son inyectables, pero no son las únicas. Existen algunas orales, mediante pastillas o gotas, como las del cólera o el rotavirus, y también intranasales que se nebulizan en la nariz, como la de la gripe que, además de inyectada, cuenta con esta alternativa. Asimismo, aunque en estos momentos no se administran, científicos de la Universidad de Stanford y la Universidad de Carolina del Norte han creado un parche de vacuna impreso en 3D que se aplica directamente sobre la piel. Contiene unas microagujas lo suficientemente largas para administrar el preparado.