La vacuna antigripal viva atenuada (LAIV por sus siglas en inglés) es un aerosol nasal que se ofrece cada temporada a la mayoría de los niños de dos y tres años, y a los demás menores en edad escolar, para ayudarles a protegerse contra la gripe.
Esta vacuna se implantó por primera vez en Inglaterra en 2013, añadiendo un curso escolar cada año natural. En algunas zonas en las que se realizó un estudio piloto, la vacuna se administró a la vez a todos los cursos de primaria.
Años más tarde, un nuevo estudio volvió a analizar los datos de 2013 a 2017, tomando las tasas de infecciones por estreptococo del grupo A (GAS por sus siglas en inglés) en las áreas piloto con vacuna intranasal y comparándola con otras áreas donde la vacuna no se había ofrecido de manera tan amplia. El estudio encontró que la incidencia de estreptococo A fue menor en las áreas piloto donde la vacuna intranasal se estaba ofreciendo a todos los niños de primaria, en comparación con las áreas donde la inmunización se estaba extendiendo gradualmente.
Los datos obtenidos fueron los siguientes:
- En los niños de dos a cuatro años, las tasas de GAS eran de 73,5 por 100.000 en las zonas piloto, frente a 93 por 100.000 en las zonas no piloto.
- En los niños de cinco a 10 años, las tasas de GAS fueron de 50,3 por 100.000 en las zonas piloto, frente a 57,8 por 100.000 en las zonas no piloto.
En el caso de la escarlatina o estreptococo invasivo del grupo A (iGAS), no hubo diferencias en los datos recogidos.
El Dr. Jamie López Bernal, epidemiólogo consultor de inmunización y prevención de la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido (UKHSA) ha explicado que “nuestros resultados sugieren que el programa de vacunas en aerosol nasal, que ofrece una protección muy buena contra la gripe, también puede contribuir a reducir las tasas de infecciones por estreptococo A entre los niños”. Asimismo, ha añadido que “los niños que contraen la gripe corren un mayor riesgo de contraer infecciones posteriores, incluidas las producidas por los estreptococos del grupo A, por lo que estos resultados son una razón más para que los padres de los niños que reúnan los requisitos necesarios los vacunen contra la gripe”. El especialista de la UKHSA ha afirmado que “esto es especialmente importante en este momento en el que estamos observando tasas inusualmente altas de infección por estreptococos del grupo A en toda la población”.
La vacuna antigripal en aerosol nasal que se administra a los niños en edad escolar y preescolar tiene un excelente historial de seguridad y se ha administrado a millones de niños en el Reino Unido y en todo el mundo.
Fuente: UK Health Security Agency