El Dr. Francisco Giménez Sánchez, director del Instituto Balmis de Vacunas, participó la pasada semana en el curso ‘Virus de transmisión respiratoria: reencontrando antiguos conocidos’, una iniciativa incluida en los Cursos de Verano de la Universidad Complutense de Madrid celebrados en San Lorenzo de El Escorial (Madrid).
En concreto, intervino en una mesa redonda titulada ‘Luces y sombras de la coordinación pandémica’, donde abordó las discrepancias en las medidas profilácticas frente a la Covid-19 entre los distintos países europeos y destacó que “en una futura pandemia debemos adoptar las medidas de manera muy precoz o su efectividad será limitada”.
El Dr. Francisco Giménez Sánchez explicó que al inicio de la pandemia todos los países europeos establecieron unos niveles de contención muy altos, pero según evolucionaba la pandemia, empezaron a relajar y a aumentar las medidas de contención a ritmo distinto en cada país, dejando un escenario muy heterogéneo ante un problema común.
En el caso de España, el director del Instituto Balmis de Vacunas recordó que en el verano de 2020 se relajaron las medidas, que volvieron a implantarse posteriormente con la segunda ola de la pandemia. “España es uno de los países que más ha tardado en relajar las medidas, sobre todo, el uso de las mascarillas, llegando a ser el país de Europa que más tiempo ha mantenido su obligatoriedad en espacios públicos”, detalló.
Por último, el Dr. Francisco Giménez Sánchez se refirió a la efectividad de las medidas de contención. Así, antes de disponer de vacunas, la que mayor impacto tuvo fue el cierre de los centros educativos, seguida del cierre de los negocios no esenciales y, en menor medida, el uso de mascarilla y el seguimiento de los casos.